El primer día del resto... (Historia de una madre)

Foto:  Ana María Zalles (mamá de Juan) 

y Juan Kudelka.-

Una imagen vale más que mil palabras. Y es que las palabras sobran ante esta foto. Una madre desesperada, impotente y desconsolada, es testigo directo del día que injustamente llevan a su hijo a la cárcel. A Ana María Zalles, solamente le quedan muchas preguntas, pocas respuestas, y quien sabe cuantos días por delante para reclamar justicia y esperar que sus oraciones a Dios sean respondidas.

Los días y los meses pasan, en medio de un calvario para la Señora Anita que va cobrando huellas profundas.  Hoy ya han pasado 16 meses. 16 meses de vivir en La Paz, una ciudad cuya altura no favorece la salud de una señora que dejó su residencia en Santa Cruz desde aquel día, el primer día del resto de su vida con tal de estar cerca de su hijo. Esta acción, sacrificio para otros; para la Sra. Anita, mamá de Juan, es "simplemente ser madre".

La presión alta, la edad ya avanzada, no son y nunca fueron un impedimento ni una excusa para evitar ese camino de ida y vuelta de su casa a la cárcel de San Pedro, que emprende decidida y generalmente solitaria todos los días,  con la esperanza de que pronto se haga justicia. Ella en su batalla cotidiana, parece no conocer el cansancio, parece empeñada en ignorar el estrés, los malestares de la presión alta y  las inclemencias de un clima que no da tregua.

Ana María Zalles prometió un día, y más que a otros, a ella misma, que solo saldría de La Paz con su hijo de la mano.  El amor de una madre es grande, y su sufrimiento cuando es por un hijo aún es mayor, a Juan lo privaron de libertad, pero no está solo, esta madre lo sabe, pero ¿Qué se puede hacer?, es su corazón la que le dicta lo que debe o no hacer, el que la impulsa a seguir luchando y el que todavía la ayuda a mantenerse con la esperanza de que pronto dejarán sus lagrimas de correr.

Señores Sacha Llorenti, Marcelo Sosa, Alvaro García Linera, Evo Morales, Juez Maldonado,  y todos los que armaron este complot para encarcelar gente inocente… ¿CÓMO DUERMEN EN LAS NOCHES???.  ¿Es posible ser ciegos o hacerse los ciegos de las consecuencias de creerse los dueños de la justicia?, ¿Cómo hacen para callar las voces de sus conciencias o con tanta maldad, egoísmo, mentiras y deseo de protagonismo cauterizaron su moral?,  ¿A ustedes no los parió una MADRE también?. ¿De qué están hechos?, ¿Cómo es posible que no vean ni se hagan cargo del daño que están haciendo?.

Señores del gobierno, cometen un error al creerse eternos y al olvidar que hoy son solamente funcionarios del gobierno de “turno” y ese turno termina.  Hoy la justicia está enferma, nadie puede negar tan lamentable situación, y de enfermarla se encargaron ustedes. Pero cuidado, la justicia puede tardar pero llega. Tarde o temprano llega. Y esa misma justicia que parece en estos días, empeñada a sus intereses personales, pronto será la que se encargará de ustedes. Ese día está cerca y más cerca de lo que ustedes pueden imaginar.

… Y cuando a ustedes les toque comparecer ante un tribunal, qué podrán argumentar, justificar, o simplemente decir, cuando se les juzgue por tanta soberbia, por las muchas personas encarceladas injustamente en Bolivia, o por las lagrimas de una madre o de muchas madres, que hasta el día de hoy perseveran en su dura lucha, con la esperanza más viva que nunca, y su amor y fe, más fuerte, esperando que  se haga justicia con su hijo en Bolivia.